Después de un largo paréntesis, regreso y lo hago con un tema peliagudo. Me refiero a los ridículos ceporros que van disparando y poniendo bombas por doquier en nombre de no sé qué estúpida reivindicación racista y de pedigrí.
Hace falta ser paleto para, en la situación actual de la sociedad (y en las anteriores etapas), en pleno Siglo XXI seguir pidiendo por la fuerza no se qué chorradas de independencia para una región que vive en la abundancia y no le falta de nada.
Es absurdo, la gente tenemos problemas infinitamente más importantes y acuciantes que esa banda de pelagatos que dicen sembrar el terror para lograr sus objetivos.
Señores, hagan un esfuerzo y salgan de su región, vean mundo, se darán cuenta del ridículo tan grande que están haciendo siendo el hazmerreir de Europa y parte de mundo.
Hay problemas más graves y asuntos más interesantes que prestarles a tención a ustedes. Desaparecerán por sí mismos, por el hastío que producen.
Lo dicho, dan risa.
No me alargo más porque no merece la pena.
